La jornada de trabajo previa a la entrega de los galardones a los premiados en la primera edición de los Premios Calidad y Servicio, concluyó con la intervención de Carmen Hernández, cirujana y coordinadora del Proyecto Cirugía en Turkana, que transmitió a los asistentes su experiencia solidaria en Kenia y cómo la contribución de las marcas puede mejorar nuestro mundo.

Hernández mostró un emotivo vídeo en el que se podía ver cómo Jimmy, un niño sin familia de la zona norte del país africano con un bulto en su cara tuvo que esperar cuatro  años para poder darle solución, gracias a la implicación personal de Carmen y su familia, y la ayuda del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, después de que no fuera fácil su tratamiento en Kenia.

Jimmy vivía en la calle cargando maletas hasta que fue acogido por Nariokotome, la misión central de la comunidad misionera de San Pablo Apóstol en Kenia. Allí, Jimmy no sólo pudo alimentarse de forma regular, sino que pudo ir a la escuela donde aprendió a leer y escribir suajili e inglés, y también donde pudo hacer amigos…

Y es que al norte de Kenia, a orillas del lago Turkana, encontramos una de las zonas más pobres del planeta. La escasez de recursos, las duras condiciones de vida y el aislamiento del resto del país hacen de esta extensa región una de las más desfavorecidas del continente africano.

 

Por eso hace ya unos años los responsables Cirujía en Turkana eligieron este destino para desarrollar allí su proyecto quirúrgico. Son ya muchas las personas implicadas en esta aventura solidaria que trata cada año de llevar un poco de esperanza al pueblo turkana.

Cirugía en Turkana nace en el 2004 gracias a la iniciativa de unos cirujanos generales del Hospital Ramón y Cajal, encabezados por la Dra. Elena Mendía, que formaron un equipo y pusieron rumbo al Hospital Gubernamental de Lodwar, en la región de Turkana.

Desde entonces, cada año se lleva a cabo una campaña quirúrgica en ese hospital a la que se han unido distintos hospitales de Madrid, entre ellos el Clínico San Carlos, o el Hospital de Alcalá.

Las empresas responsables de la celebración de los Premios hicieron una donación al proyecto en nombre de todos los ganadores y éstos se “llevaron” (próximamente os los haremos llegar a todos y cada uno de vosotros, prometido) un precioso libro de imágenes sobre el desarrollo del proyecto solidario en Turkana.