Si hay alguien que conoce bien como siente y piensa el taller multimarca español ese es Antonio Mendo. Durante años, como responsable de la red de talleres de Cecauto, trabajó infatigablemente por mejorar la competitividad de los reparadores miembros de la enseña. Por animarles a transitar por la senda de los valores añadidos, de la orientación al cliente, de la eficiencia en la gestión… de la mejora de su propia “marca” de taller. Ahora, como Gerente de Cecauto Centro, sigue estando muy cerca de los talleres, de sus necesidades y expectativas. Así que nadie mejor que él, buen conocedor de las percepciones que tienen los mecánicos del recambio con el que trabajan, para aportar su opinión sobre el valor de las marcas.
No todo es precio, nos comenta Mendo. “En absoluto. El precio siempre está presente en la mente del taller, pero no es lo primero. El precio empieza a ser importante a partir un nivel mínimo de calidad y servicio. De la percepción de calidad y servicio que el taller tiene de esa marca… y del distribuidor que se la suministra”.
Calidad y servicio antes que precio. Pero, ¿qué entendemos por calidad y servicio? “La marca es algo que permite al taller anticipar que puede esperar en términos de calidad y servicio del logo con el que viene marcada una pieza. Son todos esos valores añadidos que rodean al producto. Hablamos de imagen, de gama, de disponibilidad, de formación e información técnica, de muchas cosas… La verdad es que no siempre es fácil separar los valores que aporta el fabricante de la marca de los que aporta el distribuidor que la trabaja. Lo importante es que ambos aporten valores y que esa suma sea adecuadamente percibida por el taller”.
Con todo, de igual forma que hay diferentes perfiles de clientes, también hay posicionamientos distintos de marca. En palabras de Antonio Mendo: “Hay determinados clientes para los que no son tan importantes algunos valores añadidos que aportan marcas premium, sus necesidades son otras. Por eso hay diferentes posicionamientos de marca y por eso hay sitio para, por ejemplo, las marcas propias, mal llamadas blancas. Ahí el precio sí es más importante. El taller busca más el precio que la marca”.
Comentarios recientes